Con frecuencia las conversaciones se cortan, la decisión se pospone o se busca una solución alternativa. Esto sucede cuando el siguiente paso requiere un ingrediente adicional al análisis o a la intuición, ambos elementos esenciales de la estrategia. Ese ingrediente especial en la receta estratégica se llama: Valentía. En inglés: Courage.

No es la valentía del bombero que se lanza en medio de las llamas a rescatar a alguien atrapado; se trata de la valentía precisa para tomar decisiones que puedan tener un impacto en el futuro de la organización. Estas decisiones implican un riesgo, que puede ser importante, hasta apostar la empresa hacia una iniciativa estratégica.

En el proceso estratégico los líderes deben atreverse a pensar en soluciones innovadoras que saquen a la organización de las rutinas y comodidades alcanzadas y a desafiar los clásicos «para que le mueves, así estamos bien”, “para que te arriesgas», que atoran el diseño del futuro en las juntas y los procesos estratégicos.

El estratega debe estar listo para viajar a contracorriente de la sabiduría popular de su organización y de la resistencia natural como producto de la experiencia acumulada.

La necesaria valentía y las convicciones sobre las nuevas estrategias e innovaciones se alimentan del conocimiento profundo del negocio, del mercado y de las capacidades de la organización al enfrentar retos y superarlos.

Muchas estrategias fracasan porque no se mantienen durante el tiempo suficiente para dar fruto. Ante las dudas, se necesita la valentía para mantener el rumbo y soportar la presión mientras el mercado o la organización entiende y acepta esa nueva propuesta y espera los frutos.

El líder necesita valentía para enfrentar los cambios frecuentes que provocan la incertidumbre y la ambigüedad que presenta el mercado, la economía o la tecnología. Los cambios radicales en las empresas deben ser liderados por un valiente estratega.

En una escala de cero a diez, donde cero es aversión total al riesgo y diez es valor suicida, ¿dónde ubicas tu propia valentía?

¿Crees que necesitas aumentarla, o bien moderar tus impulsos de arriesgar y cambiar todo?