El flujo natural de la empresa es el crecimiento: primero el alcance es local, luego nacional, regional, internacional EUA, luego Europa y China. Pero la realidad es que las empresas se detienen en su crecimiento por factores externos: competencia, regulaciones, tecnología y a veces por factores internos: miedo al tamaño, ideas y creencias (por ejemplo, sobre el dinero). Muchos de los análisis del crecimiento han sido sobre los factores externos, ahora hay que identificar y desarrollar los factores internos para facilitar el scale up.

Los esfuerzos de los emprendedores y empresarios por hacer crecer sus empresas están regulados por sus creencias que determinan cómo crecer, qué tan rápido y cuál es el límite del tamaño, de qué tamaño debe ser la empresa. Según los clásicos son nuestras creencias y éstas incluyen el tipo de actividad o empresa que abrazamos y el tamaño del reto o el estándar al que aspiramos.

Las metodologías de crecimiento o scale up proveen de herramientas para aplicar en la empresa y aumentar ventas, fábricas, sucursales, tiendas o aplicaciones. Sin embargo, esas técnicas no tienen por lo general un capítulo que atienda el limitante del crecimiento.

El crecimiento trae consigo nuevas personas con otros talentos necesarios que hay que contratar, integrar y motivar, aporta nuevas responsabilidades en la comunidad empresarial y nuevos roles de responsabilidad social. La persona debe decidir hasta dónde quiere crecer, hasta dónde sus miedos o creencias le permiten crecer y cómo balancear los riesgos.

Otro factor importante que influye en las decisiones de tamaño de la empresa son las ideas sobre el dinero. La empresa tiene una correlación directa con el dinero. El flujo del dinero regula el crecimiento de la empresa. Necesitamos el dinero para operar e invertir y luego necesitamos decidir qué hacer con las utilidades y excedentes. Una manera de limitar el crecimiento es sacarle vía dividendos todo el dinero a la empresa, no dejarle para inversiones o mantenimiento más que el mínimo indispensable para que siga funcionando, pero no para crecer.

Otra creencia limitante relacionada con el dinero es que le puede hacer daño a la familia y no dejan crecer la empresa después de un cierto nivel, de tal forma que todos sigan haciendo un esfuerzo por ganarlo.

Así hay factores internos independientes del mercado, las capacidades o la tecnología, que definen la velocidad de crecimiento y el tamaño que se busca lograr para la empresa.

Y tú, ¿De qué tamaño quieres tu empresa? ¿Cómo logras o regulas el tamaño?