¿Cuánto falta para que tu industria tenga el apellido “Tech”, como Fintech, Insurtech, Edutech o Healthtech? De las financieras de los seguros, hasta la educación o la salud, si ya había una tendencia en esa dirección, ahora la velocidad se acelera  en todas las industrias debido a la Inteligencia Artificial.

Un ejemplo es el caso de Konfio de David Arena quien trabajaba en Deutche Bank en Nueva York y decidió emprender en el campo de crédito para las pequeñas y medianas empresas que están mal atendidas por la Banca tradicional de México.

Graduado en matemáticas, David desarrolló una serie de algoritmos para definir a quién prestarle con sólo la información sin garantías de bienes raíces. Así como Konfio hay muchas otras Fintech que están haciendo un trabajo diferente, bancarizando y apoyando empresas PyME y al público en general. Por ejemplo, NuBank que es ya de las más grandes emisoras de tarjetas de crédito o Xepelin, que se especializa en créditos y factoraje. La lista es interminable.

Recientemente se publicó una lista con las Fintech más grandes y en crecimiento en el mundo fuera de Asia (léase China). La variedad de servicios que ofrecen es muy amplia. Muchos empezaron con tarjetas de crédito como atractivo, luego fueron añadiendo otros servicios como ahorros, créditos simples, pagos, seguros y muchos más.

Una tendencia muy interesante es que mientras los servicios van aumentando ahora algunas de las Fintech están comercializando sus modelos y bases de datos. Ya no son bancos o financieras solamente, son fuentes especializadas de información. Por ejemplo, Xepelin ofrece un sistema de evaluación de las empresas con las cuales quieres hacer negocio que te permite usar sus modelos matemáticos y conocer a fondo tu cliente o proveedor.

Así, cada vez más rápido, empresas e industrias se convierten en digitales y tienen que prepararse y analizar cuál es su propio rumbo hacia la digitalización y ahora hacia la información.

La primera regla en el lanzamiento o relanzamiento del proyecto de digitalización es trabajar para el cliente, brindarle información para tomar decisiones y mejorar todo lo relacionado con su servicio y experiencia. Después vienen las eficiencias y la productividad interna.

En paralelo viene la colecta, acomodo y análisis de datos. Este es uno de los factores de digitalización. Las empresas son sus datos, pero hay que organizarlos para encontrar patrones y aprendizajes. Es el principio de un viaje al futuro.

Y tú, ¿ya hiciste disruption? ¿Y ya eres Tech?