Hace casi una década, en 2015, el pensador e implementador de grandes ideas estratégicas Fredmund Malik sostenía en un libro que el mundo tuvo un cambio radical ya que pasamos de la época de la revolución industrial a la de la revolución de la información. Esto traía consigo consecuencias al pasar de un mundo gobernado por el dinero y la economía a un nuevo mundo de leyes de diferente origen, como la información, el conocimiento, el insight, la complejidad y lo que Malik llama: la dinámica de los sistemas fuertemente interconectados.

En pláticas con empresarios y otros lideres de negocios la queja u observación es que el mundo (y los negocios) están cambiando muy rápido en lo inexplicable y se encuentran inmersos en el inicio de los cambios de la nueva revolución.

El caso de la inteligencia artificial muestra el cambio a la nueva revolución. Altman lidera el equipo que desarrolló la IA y de pronto son multimillonarios, pero su contribución fue generar herramientas para todas las personas con un smartphone o una laptop.

A nivel macro, hemos visto el COVID y su pandemia, la inflación y las altas tasas de interés; la gran renuncia, que es el fenómeno que se presentó postpandemia y donde muchas personas preferían no ir trabajar y quedarse en casa. En este tiempo ocurre la guerra de Rusia y Ucrania, la guerra de Israel con Irán a través de sus aliados de Hamas Gaza, Hezbola en el Líbano y Los Huties en Yemen.

Los cambios tecnológicos aparecen con transformaciones con IA, Big data y otros. La velocidad de escala internacional se va acelerando y también en México, los cambios políticos, económicos, de seguridad y control del crimen organizado que además aportan los nuevos aceleradores.

Por ejemplo, ¿con qué tipo de cambio planeas: peso o dólar? Ya sea a 16.50 o a 19.70 el valor va cambiando continuamente.

Al final, las empresas deben mantenerse atentas al cliente, atentas a los cambios en sus gustos y necesidades, atentas al mercado, a los cambios en los precios, a las ofertas, a las tendencias para reaccionar rápidamente y adaptarse a las nuevas variables. Las empresas necesitan anticipar a la competencia que ya deben conocer a detalle.

El cambio va rápido, radical y profundo llegando a todas las empresas y a todos los niveles. Como menciona Malik, vamos navegando hacia lo desconocido, viajando a alta velocidad y con poco tiempo para adaptarnos a los cambios conforme éstos se convierten en realidades.

Y tú ¿Cómo ves la velocidad en tus negocios?

y ¿Cómo estas avanzando para aprovechar estos cambios?